Jane empezaba a creer de verdad en sus sentimientos por el señor, aunque se hacía pensar a si misma que no tenía ninguna posibilidad y que debía olvidarse.
Las damas y caballeros llegaron por fin a la mansión. En el grupo se encontraba Blanche, muy cercana al señor Rochester y puede que algo más; Jane creía que solo lo quería por su dinero, y tenía razón.
Mientras tanto, la tía de Jane, la señora Reed, estaba muy enferma, y había pedido verla, ella no se negó y fue a visitarla. Allí se encontró con sus primas Georgina y Eliza, muy diferentes entre ellas; su comportamiento hacia ella había mejorado, pero seguía sin soportarlas. al igual que su tía, que parecía no haber cambiado en absoluto. Cuando ella murió, ayudó a sus primas con sus mudanzas y volvió a Thornfield.
Una vez llegó, pasó mucho tiempo con el señor Rochester, que le confesó que no quería casarse con Blanche, y le pidió matrimonio a Jane, que dudándolo, aceptó.
Cuando por fin llegó el día de la boda, Mason apareció en la iglesia diciendo que no podían casarse, por que el señor, aún estaba casado con su anterior esposa, Bertha Mason quien había provocado el incendio y atacado al mismo Mason la noche que había pasado anteriormente en la mansión.
Lucía Alcázar Abelleira 1ºB
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